18thFeb

Pedro León, diez años de ausencia. Investigación se centró en un robo cometido el día de su desaparición

Pedro Alberto León Ruiz salió de su hogar el 17 de febrero del 2012 para trabajar en la empresa de cultivo Chong Qui-Moreano (Los Ríos), pero nunca regresó. Ahí se desempeñaba como guardia de seguridad y aquel día cumpliría un turno de 24 horas. Sin embargo, esa noche ocurrió un asalto en la empresa, en el cual los delincuentes sustrajeron una caja fuerte con dinero y Pedro desapareció.

Los hechos: investigación por robo desvía la búsqueda de Pedro

Pedro León, 51 años de edad, en su domicilio en el cantón San Camilo, Quevedo. Foto: cortesía de la familia 

Al día siguiente, su esposa María Bosada acudió a la Fiscalía a colocar la denuncia por desaparición; sin embargo, la secretaria encargada Nadia Sánchez Zambrano, no receptó la petición. Aseguró que tenía que esperar 48 horas, según se expresaba en la ley para considerar a una persona desaparecida.

En ese momento, también llegó a la Fiscalía 0José Mario Moreano Sánchez, miembro del grupo Chon Qui – Moreano para presentar una denuncia sobre el mismo hecho, pero por delito de hurto, esta sí fue aceptada. A esa documentación, María solicitó una copia que serviría como evidencia para buscar a su esposo, pero la secretaria no se la otorgó.

«Así como buscaron las cosas que en ese día se robaron, también hubiesen iniciado una búsqueda de desaparición.» menciona Andrés Contreras, cuñado de Pedro León.

Denuncia del año 2012 presentada por Maria Bosada, esposa de Pedro, en la Fiscalía de Quevedo. Esta no fue receptada. Archivo familiar.

Pedro Alberto, de 51 años de edad, es oriundo de Daule. Trabajó durante doce años en la empresa de cultivo sin tener ningún acto reprochable en ese tiempo. Pese a esto, en los primeros días del suceso surgieron dos hipótesis: por un lado, los dueños de la empresa lo involucrarían como participante del robo de las instalaciones y por otro lado se hablaba de un posible asesinato. Pasaron días y meses, no había respuestas sobre el paradero de Pedro y en la Fiscalía la investigación avanzaba por el presunto delito de robo hasta el año 2014.

«Los primeros comentarios después del robo de la empresa fueron que: se perdió una caja fuerte con dinero y que lo mataron a mi cuñado» Andrés Contreras, cuñado de Pedro León

Inicia la búsqueda: dos años después de su desaparición

Por más de dos años sus familiares al no tener ningún indicio sobre su rastro y al verse desamparados por la justicia de la provincia de los Ríos acudieron a la ciudad de Quito para solicitar apoyo.

Una vez en Quito, Narcisa León ( hermana de Pedro) y su esposo Andrés Contreras (cuñado de Pedro) conocieron a la Asociación de Familiares y Amigos de Personas Desaparecidas en Ecuador (Asfadec). Ellos los asesoraron en los procesos para exigir la búsqueda de Pedro y que la investigación sea tratada como desaparición 

En mayo del 2014, dos años después de la desaparición de Pedro, el Estado ecuatoriano da paso a la denuncia puesta por su familia para que se inicie la búsqueda y esclarecimiento del caso. Pero el expediente por desaparición consta desde el año 2014 y no desde el año en que realmente se dieron los hechos, lamenta su cuñado Andrés.

Denuncia por desaparición presentada en la Fiscalía General del Estado, en 2014. Fuente: archivo familia.

Fiscalía perdió indicios claves en estos 10 años

En noviembre de 2014, dos años después de la desaparición; el primer fiscal del caso ordenó que se realice la búsqueda de Pedro en el río Quevedo porque se manejaba la teoría de que fue asesinado y lanzado a este afluente. En este barrido participó el Grupo de Operaciones Especiales (GOE), personal de las Fuerzas Armadas y Cuerpo de Bomberos de Quevedo, sin obtener ningún resultado.

Luego en 2016, cuatro años después de la desaparición, el segundo fiscal del caso ordenó realizar el reconocimiento del lugar de trabajo de Pedro, pero tampoco dio resultado. Dos años después, en el 2018, un tercer fiscal pidió realizar por primera vez una prueba de luminol y el cuarto fiscal no realizó acciones en el caso de Pedro León.

Para la familia, el último fiscal tiene en pausa la investigación debido a la emergencia sanitaria covid-19 por la cual sufrió afecciones a su salud, menciona Contreras.

Cinco fiscales hasta el año 2022 han manejado el caso y hasta el momento no existe ninguna respuesta, ningún indicio.  «La Fiscalía se preocupaba de los casos más mediáticos y a nosotros nos dejaron en el olvido», dice Narcisa, hermana de Pedro.

Negligencia en la actuación de desaparición en 2012

Para Nathaly Farinango, del área jurídica de Asfadec, las autoridades estatales desde el momento de la desaparición tenían la obligación de dar una atención inmediata de búsqueda, investigación y localización de la persona desaparecida.

Las autoridades antes de diciembre del 2012 manejaron un criterio erróneo al establecer que después de 48 horas se podría reportar la desaparición de una persona. Esta decisión provocó una actuación negligente que se iba en contra de los principios Constitucionales que debe tener la administración pública como la eficacia y eficiencia.

Cuarenta y ocho horas después tampoco se receptó la denuncia, pese a lo previamente dicho por Fiscalía. María Bosada regresó por segunda ocasión con un escrito para dar conocimiento de los hechos suscitados y reportar la desaparición de Pedro, pero nuevamente la denuncia fue negada. No se agilitó, ni inició la investigación, solo hasta el 2014 se empezó a realizar diligencias para la búsqueda, comenta Farinango.

María Bosada, esposa; Pedro León y Kelvin León, hijo; en un cumpleaños familiar. Archivo familiar.

Nathaly Farinango aclara que actualmente las autoridades que forman parte del Sistema Nacional de Búsqueda de personas Desaparecidas y Extraviadas reconocen que las primeras 24 horas son indispensables para la búsqueda y localización de personas reportadas como desaparecidas.

Además, puntualiza en que esto también se estableció hace casi 10 años con la Resolución No 160-2012 del Consejo de la Judicatura del 8 de noviembre del 2012. En esta resolución se señala “ la Policía Nacional al momento de tener conocimiento de la desaparición de una personas procederá sin dilación alguna recabar datos para la búsqueda y localización”. Puedes leer aquí la resolución de 2012.

También desde el 2020 con la aprobación de la Ley Orgánica de Actuación de Personas Desaparecidas y Extraviadas se garantiza una búsqueda inmediata.  En su artículo 8 .1 se garantiza: “ La búsqueda especializada, inmediata, diligente, oportuna y permanente desde que se recibe el reporte, noticia o denuncia de la desaparición o extravío de una persona hasta su localización”

Puedes leer la Ley Orgánica de Actuación de Personas Desaparecidas y Extraviadas en el Ecuador, aquí

Familia exige respuestas

El padre y el hermano de Pedro fallecieron el año pasado en 2021 sin tener ninguna noticia sobre el paradero de su ser querido.  Su familia ha afrontado graves situaciones de salud y comentan que no han dejado de buscarlo y recordarlo como una persona justa, disciplinada, con dedicación a su familia y a su trabajo.

Su familia ha realizado plantones en Quevedo y en Quito con la finalidad de que su caso sea visibilizado por las autoridades. Sin embargo, desde las instituciones de búsqueda estatal muchos de los procesos de la investigación fueron tardíos y se realizaron cuando ya no existía alguna evidencia.

«Nuestros recursos  económicos no han sido los suficientes como para poder manejar horarios de abogados; entonces, Dinased y Fiscalía lo han manejado a su manera. Es irónico que en el mismo trabajo al cual dedicó más de una década de sus servicios sea desaparecido, él cuidaba tanto su trabajo que cuando le tocaba ir a sufragar no se iba, prefería pagar las multas antes que perderlo», menciona Andrés.

Kelvin León, 19 años de edad, es el hijo de Pedro León y actualmente es estudiante de la carrera de Derecho. Archivo familiar.

El hijo de Pedro se llama Kelvin León. Él ahora estudia la carrera de Derecho y se encuentra en los últimos semestres. Kelvin busca obtener respuestas en el caso de su padre en un mundo en donde la injusticia es cada vez más común, dice su familia. 

Ligia Yumi (Riobamba, 1993)

Licenciada en Comunicación Social, Periodismo por Universidad Central del Ecuador. Estudiante de Maestría Comunicación Política en UIDE.

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